¿Tienes un grave problema económico que no sabes cómo resolver?
¿Te angustia no poder hacer frente a todas tus obligaciones financieras?
Por mucho que hayas previsto con antelación todos los pagos que tienes que hacer, basta con que se produzca un fallo en la gestión de los cobros para que te encuentres metido en un problema difícil de resolver.
Si eres autónomo, seguro que te suena este problema: un cliente grande se hace el remolón y tarda más de la cuenta en pagarte una factura. Con eso es suficiente para que toda tu tesorería se vea descabalada por culpa de ese cliente que no paga a tiempo las facturas.
Y este problema de retrasos y falta de seriedad en los pagos también te afecta, incluso aunque trabajes por cuenta ajena —siempre que seas empleado de un autónomo o de una pyme—, ya que cada vez son más habituales este tipo de prácticas.
La situación es peliaguda porque, por muy previsor que seas, los autónomos y las pymes no suelen disponer de un músculo financiero suficientemente fuerte como para hacer frente a ese quebranto económico.
Así que si tienes pendientes de cobro una o varias facturas no te quedará más remedio que retrasar también tus pagos a proveedores.
Sin embargo, como te pille el final de trimestre, el problema se agrava más, ya que hay una obligación ineludible e inaplazable para cualquier autónomo: el pago de impuestos trimestrales.
Y por si fuera poco, puede ser que la Seguridad Social te haya cargado la cuota de autónomos, dejándote sin un euro para pagar los restantes impuestos.
Ante esta situación, es normal que te sientas agobiado y que te entren ganas de tirar la toalla, porque no te queda otra que abonar los impuestos, si no quieres meterte en un lío mucho más gordo.
La única salida que encuentras es hablar con tu banco para ver si puede concederte algún crédito al consumo con el que liquidar los impuestos y el resto de pagos pendientes a proveedores.
Te diriges a tu sucursal y, tras unos cuantos minutos esperando en una cola a que te atiendan, le cuentas el problema que tienes al empleado del banco.
Tras escucharte, el bancario te mira inquisitivamente para luego indicarte que hacen falta unos cuantos documentos como los libros de cuentas, las declaraciones trimestrales y anuales de IRPF y de IVA, las escrituras de tu casa, etc. para poder tramitar el crédito.
Pierdes una jornada de trabajo recopilando y fotocopiando toda la documentación que te han pedido y se la llevas en persona al banco, no sin antes aguardar un buen rato hasta ser atendido.
La mirada del empleado del banco es aún más fría cuando hojea con desinterés la documentación que le acabas de entregar, para luego anunciarte que será necesario que traigas asimismo las declaraciones de IVA de algunos trimestres anteriores.
Armándote de paciencia, regresas a tu oficina en busca de los papeles que faltan y los vuelves a llevar al banco para que estudien tu solicitud.
Al entregar esos documentos, te advierten de que no podrán darte una respuesta hasta dentro de un par de días como poco, ya que tienen que estudiar con detenimiento tu solicitud.
Esperas con ansiedad el aviso del banco, ya que el plazo para pagar los impuestos se te está echando encima peligrosamente. Pero cuando recibes la llamada del empleado te preocupas aún más al escuchar que no te han aprobado tu solicitud porque tu perfil de riesgo es muy elevado.
Entonces te quedas bloqueado, sin saber qué hacer, porque al día siguiente vence el plazo para pagar los impuestos.
Si estás viviendo una situación similar a esta, no te preocupes: la solución se encuentra en los créditos rápidos online que puedes encontrar en esta página de Dinero Rápido.
Hace años, la única opción para acceder a la financiación externa pasaba por los bancos y por los establecimientos de crédito.
Sin embargo, estas entidades no suelen ayudar a personas que están pasando apuros económicos graves, ya que consideran la concesión de créditos como un negocio orientado exclusivamente a proyectos solventes y que cuenten con las suficientes garantías.
Por eso, solo aceptan a clientes con buen historial crediticio, ingresos fijos recurrentes y propiedades que puedan servir de aval en caso de impago.
Los bancos, en general, no suelen conceder créditos a autónomos con pocos ingresos, ni a personas desempleadas o jubiladas.
Pero la situación ha cambiado mucho gracias a la irrupción de las compañías fintech.
Este tipo de empresas han logrado reducir mucho sus costes internos gracias a su vocación tecnológica, centrada en el desarrollo de aplicaciones informáticas para optimizar las gestiones y los procesos.
Junto a eso, aunque son negocios que buscan la rentabilidad, también tienen claro que deben cumplir con una función social basada en ayudar mediante préstamos rápidos a aquellas personas que corren el peligro de caer en problemas graves por falta de liquidez.
Con esa idea en mente, el modelo de negocio de estas fintech se centra en la gestión de préstamos rápidos y minicréditos online, que pueden pedirse a través de Internet.
Los créditos rápidos online sin nómina destacan sobre todo porque son urgentes y fáciles de tramitar.
Si te encuentras con un problema financiero grave y tienes mucha prisa por solucionarlo —tal vez porque tus deudas no pueden esperar más tiempo—, la mejor opción es, sin ninguna duda, este tipo de créditos que se tramitan con tanta rapidez que en unos pocos minutos sabrás si te lo han concedido o no.
Además, son fáciles de conseguir, ya que la gestión se ha simplificado mucho y los criterios de concesión tan poco son tan exigentes como los que ponen en los bancos.
Este tipo de operaciones están dirigidas a personas que se encuentran metidas en un problema difícil de resolver.
Las fintech saben que muchas personas pueden caer en una espiral de deudas destructiva si no reciben ayuda justo en el momento en el que empiezan a necesitarla.
Si tienes que realizar un pago con urgencia, la mejor forma de obtener el dinero es a través de uno de estos créditos fáciles de conseguir y que se gestionan a través de Internet.
Estos son los principales beneficios de contratar uno de los préstamos rápidos online que puedes encontrar en esta sección de Dinero Rápido:
Uno de los principales problemas que se encuentran muchos clientes es que no pueden cumplir con todos los requisitos que les ponen los bancos a la hora de concederles un préstamo.
En cambio, las fintech que encontrarás en Dinero Rápido son mucho menos exigentes, puesto que, a grandes rasgos, no te van a exigir más que los siguientes puntos.
No importa si eres español o extranjero, pero sí que es importante que tengas la residencia legal en España.
Por eso, siempre vas a tener que aportar un DNI o un NIE.
En caso de que no puedas demostrar que tienes la residencia legal en España, no podrán concederte un préstamo.
Estos préstamos personales sin papeles online se tienen que pagar mediante cargos en tu cuenta corriente.
Y además necesitas tener acceso online a la misma, porque algunas financieras te pedirán que te autentiques con tus claves de banca online.
Aunque algunas financieras aceptan a clientes que no tienen nómina —ya sea porque son autónomos, desempleados o están jubilados—, sí que van a necesitar que les justifiques de algún modo que cuentas con ingresos suficientes como para afrontar el pago del crédito.
Si no tienes nómina, puedes aportar una pensión, un subsidio de desempleo o cualquier otro justificante.
Ya has visto que las financieras que tramitan créditos rápidos online suelen ser menos exigentes que los bancos a la hora de aprobar operaciones.
No solo porque acepten a clientes que no cuentan con una nómina, sino también porque muchas de estas entidades tampoco exigen que intervenga un avalista que se haga cargo de la devolución del dinero prestado, en caso de que tú no puedas hacerlo.
Si vas a pedir un crédito rápido, tienes que seguir los siguientes pasos:
Transferencia en tu cuenta: en unos minutos recibirás una respuesta y te propondrán que firmes online el contrato de préstamo. Para ello, es posible que te manden algunos códigos a tu móvil, que deberás introducirlos en el sistema como prueba de conformidad. Y una vez que esté el contrato firmado, se da la orden de transferencia a tu cuenta, para que puedas disfrutar del dinero lo antes posible.
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